Revolución rusa (1917)
En 1917, Rusia experimentó una revolución que derrocó al régimen zarista y marcó el comienzo de la era comunista. El descontento con la monarquía de Nicolás II creció debido a la crisis económica, la hambruna y la desastrosa participación del país en la Primera Guerra Mundial.
En febrero, las protestas obreras y la revuelta de los soldados obligaron a la abdicación del zar y se estableció un gobierno provisional dirigido por Alexander Kerensky. Sin embargo, la inestabilidad persistió y allanó el camino para los bolcheviques, liderados por Vladimir Lenin. En octubre, el partido comunista tomó el poder en un golpe de estado conocido como la Revolución de Octubre, estableciendo un gobierno socialista basado en ideales marxistas.
El nuevo régimen retiró a Rusia de la guerra e inició reformas radicales, como la expropiación de tierras y la nacionalización de la economía. La Revolución Rusa desembocó en una sangrienta guerra civil entre los bolcheviques y sus oponentes, consolidando, en 1922, la creación de la Unión Soviética. El acontecimiento transformó la política mundial e influyó en los movimientos socialistas de todo el mundo, iniciando la polarización entre el capitalismo y el comunismo que marcaría el siglo XX.
¿Sabías??