El yoga, más allá de ser una práctica física
El yoga, más allá de ser una práctica física, ofrece una filosofía estructurada en ocho miembros conocidos como Ashtanga Yoga, que guían el comportamiento, la disciplina y la conciencia. Los dos primeros, Yamas y Niyamas, abordan la ética social y la disciplina personal, incluyendo valores como la no violencia, la honestidad, el desapego, la pureza, el contentamiento y la autorregulación, formando la base para una vida equilibrada. Asana se refiere a la práctica física, Pranayama implica el control de la respiración, y Pratyahara trabaja en la retirada de los sentidos de los estímulos externos, permitiendo la concentración interna. Dharana y Dhyana fomentan la concentración y la meditación, conduciendo a la claridad mental, mientras que Samadhi representa la autorrealización y un estado elevado de conciencia. Estas filosofías no solo fortalecen al individuo, sino que también fomentan la reflexión sobre la relación con el entorno y con uno mismo, promoviendo sostenibilidad, ética y bienestar comunitario. Siguiendo esta progresión gradual, el practicante pasa del estado de confusión a la claridad, alcanzando mayor conciencia, control y entrega. La práctica del Ashtanga Yoga demuestra así su relevancia en el contexto moderno, integrando cuerpo, mente y valores éticos esenciales para una vida plena.
¿Sabías??