El rey Esteban y la reina Leah
En el clásico La Bella Durmiente (1959), el Rey Esteban y la Reina Leah protagonizan una de las historias más tristes del cuento de hadas. Los padres de la princesa Aurora están llenos de alegría mientras celebran el nacimiento de su hija, pero su felicidad dura poco. Durante el bautizo real, la temida Maléfica aparece inesperadamente y lanza una terrible maldición sobre la recién nacida, condenándola a caer en un sueño profundo en su cumpleaños número 16.
Desesperados por salvar a su hija, el rey y la reina confían a Aurora al cuidado de las hadas madrinas, quienes la llevan a vivir escondida en el bosque. Durante años, Stefan y Leah gobiernan el reino sin saber nada de la princesa, consumidos por el anhelo y el miedo de no volver a verla. Cuando finalmente se cumple la maldición, el castillo se hunde en la tristeza y la pareja real se queda dormida junto con el resto del reino.
Aunque aparecen poco en la trama, el dolor y la preocupación de Stefan y Leah son esenciales para transmitir la emoción y la gravedad de la maldición, convirtiéndolos en figuras fundamentales en el desarrollo de este clásico atemporal de Disney.
¿Sabías??